El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, expresó ayer su profunda preocupación ante la escalada de violencia en Gaza, calificando la situación como una matanza de civiles sin paralelo desde que asumió el cargo en 2017. Guterres subrayó la alarmante cifra de niños asesinados en las últimas semanas, independientemente de las discrepancias en las cifras proporcionadas por Hamas.
Mientras tanto, se reporta que negociadores se encuentran cerca de alcanzar un acuerdo para la liberación de hasta 75 rehenes de Gaza, incluyendo numerosos niños y mujeres, en un intento respaldado por Qatar y Estados Unidos. Aunque no hay un acuerdo firme aún, las esperanzas de liberación aumentaron cuando el presidente estadounidense, Joe Biden, expresó optimismo al ser cuestionado sobre la posibilidad de un pacto.
La liberación de los rehenes, entre ellos aproximadamente 40 menores, podría producirse a principios de la próxima semana, según fuentes diplomáticas. Aunque se mantiene la cautela y no hay un acuerdo concreto, se sugiere que se podría implementar un alto el fuego o una pausa en las hostilidades como parte del acuerdo.
Las familias de los cautivos están cada vez más preocupadas por la seguridad de los rehenes, especialmente después de los informes sobre el descubrimiento de los cuerpos de dos mujeres en Gaza. Sin embargo, las autoridades israelíes insisten en su enfoque de lograr la liberación inmediata e incondicional de todos los rehenes, y el alto el fuego no se considera actualmente en las negociaciones.
La situación humanitaria en Gaza sigue siendo crítica, con miles de palestinos desplazados y enfrentando condiciones extremas debido a la violencia en la región. Mientras tanto, los combates continúan y Estados Unidos ha advertido a Israel sobre la importancia de considerar la seguridad de los civiles palestinos que huyen en medio de la expansión de la ofensiva israelí en el sur de Gaza.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) expresó su horror por el reciente ataque al Hospital Indonesio en Gaza, donde murieron 12 personas. La directora de la OMS, Tedros Ghebreyesus, condenó el ataque y destacó la necesidad urgente de poner fin a la violencia en la región.
A medida que las negociaciones continúan, la comunidad internacional sigue observando con creciente preocupación la crisis humanitaria en Gaza y espera una pronta resolución para poner fin al sufrimiento de la población civil.