En las primeras horas del martes (hora local), un devastador sismo de magnitud 5.9 azotó la provincia de Gansu en China, dejando un saldo trágico de al menos 86 personas fallecidas, según informó la agencia estatal Xinhua.
El temblor, que provocó el colapso de numerosas viviendas, generó caos y pánico en la región, donde cientos de residentes salieron precipitadamente a las calles. Las labores de rescate se activaron de inmediato para atender la emergencia.
La agencia destacó que el sismo tuvo lugar a poca profundidad de la superficie, movilizando a los servicios de gestión de emergencias y extinción de incendios para intervenir y apoyar en las operaciones de rescate.
Según el Instituto Geofísico Estadounidense (USGS), el sismo se registró a las 15:59 horas (hora de EU) a una profundidad de diez kilómetros. Aunque inicialmente se mencionó una magnitud de 6, la agencia ajustó la cifra a 5.9.
El epicentro del temblor se localizó a 100 kilómetros al suroeste de la capital provincial, Lanzhou, y fue seguido por varias réplicas que aumentaron la tensión en la zona afectada.
Xinhua reportó daños no solo en Gansu, sino también en partes de la vecina provincia de Qinghai. Los residentes de ambas provincias experimentaron los estragos de un evento sísmico que, desafortunadamente, se suma a la frecuente actividad sísmica en China.
Cabe recordar que en agosto, un sismo de magnitud 5.4 sacudió el este del país, dejando más de 20 heridos y provocando el derrumbe de decenas de edificios. La nación asiática, nuevamente, se enfrenta a la difícil tarea de recuperarse de una tragedia natural.