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Durante la sesión solemne celebrada este jueves, Lenia Batres Guadarrama asumió el cargo de magistrada en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). La ministra presidenta, Norma Lucía Piña Hernández, le otorgó la toga magisterial en medio de la ovación de los presentes.
En su primer discurso, la recién nombrada ministra lanzó críticas hacia la actuación de la SCJN, señalando que se ha extralimitado al abordar casos con fuertes connotaciones políticas, en detrimento de su responsabilidad constitucional. Batres Guadarrama denunció que la Corte ha asumido roles legislativos, definiendo normativas que prevalecen tras declarar la inconstitucionalidad, invadiendo así la esfera del poder legislativo electo democráticamente.
“La Suprema Corte se ha colocado por fuera y por encima del trabajo que realiza la Auditoría Superior de la Federación, impidiendo ejecutar auditorías de desempeño”, afirmó la ministra, enfatizando la necesidad de una Corte más sensible a los problemas prioritarios del país, como la seguridad pública.
Batres también abordó la cuestión de los sueldos de los ministros de la SCJN, defendiendo la legislación existente y subrayando que esta disposición constitucional no responde a afiliaciones partidistas, sino que debe acatarse de acuerdo con la Constitución.
En otro aspecto de su intervención, la ministra destacó la importancia de su llegada a la SCJN, resaltando avances en la paridad de género y la incorporación de visiones críticas al Poder Judicial. Se refirió a su designación como “Ministra del Pueblo” y expresó su compromiso con esta misión.
Lenia Batres, la decimoquinta mujer en la historia de la SCJN en usar toga, fue juramentada en compañía de su familia. Su adscripción a la segunda sala, que se ocupa de asuntos administrativos, fue propuesta por la ministra presidenta Norma Piña al concluir la sesión. La próxima sesión pública del pleno se llevará a cabo el 8 de enero.
La designación de Batres como ministra fue realizada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, tras tres rondas de votación en el Senado. La propuesta original incluía a Bertha María Alcalde y Eréndira Cruzvillegas, todas relacionadas con el gobierno actual. La nueva ministra, con un historial político diverso, ha sido miembro de diversos partidos y ha asesorado tanto a López Obrador como a Claudia Sheinbaum durante sus respectivas administraciones.
