Ernestina Godoy Ramos, titular de la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México, defendió su gestión argumentando un cambio estructural en la procuración de justicia, colocando a la víctima en el centro y mejorando la eficiencia de la Policía de Investigación. En vísperas de la votación en el Congreso para ratificar su cargo por cuatro años más, Godoy afirmó que una evaluación no partidista respaldará su continuidad.
Durante la inauguración de las coordinaciones territoriales de BJ-1 y BJ-2, la fiscal destacó la certificación del personal y señaló que, si se realiza una evaluación imparcial de su desempeño, confía en obtener el respaldo de los diputados. Martí Batres, jefe de Gobierno de la Ciudad de México, expresó su apoyo a Godoy, argumentando la reducción de la incidencia delictiva y la incorporación de una perspectiva de género en las investigaciones.
Sin embargo, en el Congreso, las posturas fueron divididas, con grupos a favor y en contra de la ratificación. Los legisladores de oposición, especialmente del PAN, anunciaron su rechazo, alegando ser víctimas de la fiscalía. La discusión sobre la continuidad de Godoy en el cargo está programada como el punto 27 del orden del día de la sesión ordinaria.
Panistas y priístas, en un esfuerzo conjunto, pernoctaron en el recinto legislativo para garantizar la participación de sus bancadas en la votación en contra de la ratificación de la fiscal. La decisión final respecto a la continuidad de Ernestina Godoy se presenta como un momento crucial en medio de controversias y tensiones políticas en el ámbito local.