El rápido incremento de las tasas de interés en los últimos dos años y medio con el fin de controlar el aumento de los precios de bienes y servicios a nivel nacional y mundial resultó en el pago de más de un billón de pesos en intereses de la deuda pública de México durante 2023. Esto representó un promedio diario de 2,863.2 millones de pesos pagados en intereses, superando la inversión en infraestructura y equipos.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público reportó un costo financiero de la deuda de un billón 45 mil 85.9 millones de pesos, un aumento del 21.5% con respecto al año anterior y un 17.9% más alto que el gasto en inversión física. Aunque superó la marca del billón de pesos, el costo de la deuda se mantuvo por debajo de la cifra presupuestada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público al principio del año, lo que generó un ahorro de 34 mil 1.2 millones de pesos.
Este incremento en el costo financiero de la deuda se debió a la escalada de las tasas de interés en México, influenciada por la inflación y la situación internacional. El Banco de México aumentó su tasa de referencia desde junio de 2021 y la mantuvo en 11.25% desde marzo del año pasado.
El costo de la deuda en moneda nacional aumentó un 25.1% anual, mientras que las obligaciones en moneda extranjera también experimentaron un aumento del 11.1% debido al encarecimiento del crédito a nivel internacional. El impacto de estas tasas de interés en constante aumento ha generado preocupaciones sobre el manejo de la deuda pública en el país.
A pesar de este panorama, las autoridades gubernamentales siguen buscando formas de mitigar los efectos de la inflación y las tasas de interés elevadas en la economía nacional.