En una reunión trilateral de alto nivel entre México, Estados Unidos y Canadá, se anunciaron medidas concretas para combatir el tráfico ilegal de armas, en un esfuerzo por fortalecer la seguridad regional. La delegación estadounidense se comprometió a colaborar estrechamente con México para rastrear la procedencia de las armas que ingresan ilegalmente al país, especialmente aquellas de uso exclusivo del ejército estadounidense.
La secretaria de Relaciones Exteriores, Alicia Bárcena, destacó la importancia de compartir información y mejorar la regulación existente en los tres países para abordar este grave problema. Se acordó también presentar los resultados de estas nuevas estrategias durante la próxima cumbre de líderes de América del Norte en abril.
Entre las iniciativas propuestas se encuentra la implementación de un mecanismo trilateral de seguimiento de precursores de sustancias como el fentanilo, así como la participación en un comité nacional de objetivos para obtener información en tiempo real sobre el tráfico de drogas y armas.
Durante la reunión, se resaltó la urgencia de abordar el problema del fentanilo, que representa una amenaza significativa para todos los países de la región. Canadá reconoció la gravedad de la situación y se comprometió a trabajar en conjunto para enfrentar los desafíos comunes en materia de seguridad.
La secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, compartió los resultados positivos de la estrategia de combate al crimen organizado en México, destacando la colaboración entre diversas agencias gubernamentales que ha llevado a la detención de miles de delincuentes y la desarticulación de bandas criminales.
Al término del encuentro, Bárcena detalló que, mediante el intercambio de información con Estados Unidos, se podrá rastrear el origen de las armas decomisadas en México, lo que representa un paso importante en la lucha contra el tráfico de armas en la región.