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Isabel Gómez Macotela, miembro respetada del Círculo de Abuelos Sabios en Zapotlán, insta a que la niñez y juventud se conecten con la Madre Tierra en vista de la inminente crisis de agua potable. Advierte sobre la necesidad de despertar la consciencia y prepararse para los cambios que se avecinan.
La abuela sabía subraya la importancia de reconectar con elementos esenciales como el sol, fuente de energía y luz, y la tierra, proveedora de sustento, vivienda y vestimenta. Lamenta que muchas personas estén desconectadas de estos elementos vitales y favorezcan los templos sobre la conexión con la naturaleza.
“Con un elemento que nos falte no existiríamos o viviríamos”, enfatiza Gómez Macotela, destacando la necesidad de transmitir esta ideología a las generaciones más jóvenes. Aboga por la participación en ceremonias ancestrales, como la reciente bendición de las semillas en el parque Hidalgo, como medio para pedir por la fertilidad de la tierra.
En lugares como Querétaro y Xochimilco, se ha logrado involucrar a la infancia, considerada heredera de estos conocimientos. La abuela sabía destaca la importancia de enseñar a los niños y jóvenes para preservar la sabiduría ancestral.
Para aquellos en Pachuca, señala que el entorno citadino no es propicio para invocar energía, instándolos a asistir a ceremonias ancestrales en lugares conectados con la naturaleza. Sugiere opciones como la Huasteca, Acaxochitlán, la Sierra Otomí-Tepehua, e incluso realizar ceremonias desde casa, siempre fuera, en contacto con la tierra y la naturaleza.
Gómez Macotela invita a la participación activa en ceremonias, como las que marcan el inicio del ciclo agrícola, donde se busca la lluvia para asegurar el crecimiento de las semillas y garantizar la provisión de alimento y vida.
