La Auditoría Superior de la Federación (ASF) ha revelado posibles daños al tesoro público por una alarmante cifra de 29 mil millones de pesos en su revisión de la cuenta pública 2022. De esta suma, aproximadamente 6 mil 800 millones están relacionados con el gobierno federal, mientras que el resto se distribuye entre otros poderes, órganos autónomos y entidades locales.
Durante la presentación del tercer y último informe de fiscalización, el titular de la ASF, David Colmenares Páramo, destacó que si bien los resultados no son desalentadores, es fundamental abordar las áreas de mejora. Afirmó que la colaboración entre la ASF y los responsables de los tres niveles de gobierno ha fortalecido la capacidad de identificar y corregir irregularidades, lo que ha contribuido a reducir la cantidad de acciones correctivas necesarias.
Colmenares Páramo respondió así a las críticas previas sobre la disminución en el número de denuncias interpuestas por la ASF contra funcionarios públicos implicados en presuntos malos manejos financieros. Destacó el enfoque preventivo de la ASF, centrado en la capacitación y la simplificación de procesos para evitar observaciones injustificadas.
El auditor subrayó la importancia de la colaboración efectiva con los titulares de los tres poderes para aclarar las observaciones surgidas durante las auditorías, lo que ha contribuido a reducir el tiempo y la cantidad de acciones emitidas para su aclaración.
A pesar de los logros, Colmenares Páramo reconoció la necesidad de acelerar los resultados y anunció modificaciones para mejorar la eficiencia del proceso de fiscalización.
El informe presentado incluye una cantidad sin precedentes de informes individuales de auditoría, abarcando una amplia gama de revisiones de cumplimiento financiero, desempeño y gasto federalizado. Estos esfuerzos, según Colmenares Páramo, representan un hito en la labor de fiscalización de la Auditoría Superior de la Federación.