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La ausencia de escurrimientos y filtraciones en la Laguna de Zumpango, ubicada en el Estado de México, está generando consecuencias adversas en Hidalgo, afectando al menos a dos mantos acuíferos en la región.
Marco Antonio Moreno Gaytán, líder de la Sociedad Ecologista Hidalguense (Sehi), resalta que esta situación provocará un aumento de entre uno y uno punto cinco grados en las temperaturas locales. La laguna, al igual que otras, cumple un papel crucial como regulador de humedad y en el ciclo de lluvias.
“Ayudan a regular el clima; la humedad y el agua son elementos de evaporación conocidos como evapotranspiración, que impulsan las lluvias en la zona. Este proceso es esencial para la vida“, explicó Moreno Gaytán, destacando su importancia para la agricultura, mantos acuíferos y pozos.
Los municipios afectados en Hidalgo incluyen localidades cercanas al norte del Estado de México, como Tizayuca, Tolcayuca, Villa de Tezontepec, San Agustín Tlaxiaca, Pachuca, Zapotlán y Zempoala.
El presidente de la Sehi enfatizó que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) debería proporcionar información detallada sobre la cantidad de agua proveniente de la Laguna de Zumpango que beneficia a Hidalgo. Esto ayudaría a comprender la relevancia de este cuerpo de agua, vital para los servicios ambientales en la región.
Asimismo, subrayó la necesidad de intervención por parte de la Secretaría de Medio Ambiente federal, no solo en la formulación de políticas públicas para cuerpos de agua, sino también en la implementación de medidas preventivas, como la evaluación de impacto ambiental. Este último aspecto, creado en la década de los 80, ha sido pasado por alto en la actualidad.
Moreno Gaytán recordó el intento pasado de secar la Laguna de Tecocomulco, donde la resistencia ciudadana prevaleció, preservando este vital cuerpo de agua que contribuye a la agricultura, pesca y turismo local.
Desde hace dos años, la Laguna de Zumpango ha experimentado una disminución en sus niveles de agua, y según los habitantes, se especula sobre la posibilidad de que se trate tanto de la falta de lluvias como de una sequía deliberada para evitar la presencia de aves migratorias, impactando las operaciones del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA).
