El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, salió en defensa de su familia y, al mismo tiempo, demandó que, en caso de haber cometido algún delito, sus hijos enfrenten las consecuencias legales como cualquier ciudadano. Esta declaración, realizada durante su conferencia matutina del día de hoy, se produjo en respuesta a investigaciones periodísticas y una denuncia presentada ante la Fiscalía General de la República que implican a sus hijos en posibles actos de corrupción y tráfico de influencias.
López Obrador reiteró su llamado al respeto hacia su familia y negó la veracidad de los señalamientos realizados en la denuncia presentada por la candidata presidencial de la alianza opositora Fuerza y Corazón por México, Xóchitl Gálvez. Esta denuncia, presentada el 25 de marzo, acusa a los hermanos Andrés Manuel y Gonzalo Alfonso López Beltrán, así como a otros familiares y allegados, de presunta asignación irregular de contratos en la compra de insumos para la construcción del Tren Maya.
En relación con este caso, CNN ha intentado verificar la existencia de la denuncia ante la Fiscalía y obtener la respuesta de los hermanos López Beltrán a las acusaciones, sin obtener respuesta hasta el momento.
El presidente mexicano destacó que la denuncia que implica a sus hijos en el reciente incidente del descarrilamiento de un vagón del Tren Maya, debido a la presunta mala calidad de los materiales adquiridos y a la corrupción, es “una gran falsedad”.
López Obrador reconoció la validez del debate público, pero advirtió a sus opositores que eviten involucrar a familiares o menores en controversias políticas. “Si tienen algún problema conmigo, que sea conmigo, no con mis hijos”, enfatizó.