El presidente Andrés Manuel López Obrador desestimó los incidentes ocurridos en Motozintla como actos de propaganda montados por grupos opositores o criminales en época electoral. López Obrador consideró que los hechos, que involucraron a la candidata Claudia Sheinbaum, fueron exagerados y enfatizó que Latinus, el medio que reportó el incidente, tiene una posición contraria a su gobierno. Aunque reconoció la presencia de disputas entre grupos del crimen organizado en la región, aseguró que la integridad física de Sheinbaum no estuvo en peligro y reiteró su disposición para proporcionar seguridad a todos los candidatos presidenciales.
El presidente destacó la serenidad de Sheinbaum ante la situación, pero criticó la posibilidad de que el incidente sea utilizado con fines electorales. Afirmó que, de ser necesario, también defendería a los candidatos de la oposición ante cualquier amenaza. Aunque se comprometió a investigar el incidente, López Obrador restó importancia a los hechos, sugiriendo que solo buscaban obtener atención mediática.
En cuanto a las críticas sobre la seguridad de la candidata, López Obrador explicó que todos los candidatos cuentan con protección y sugirió que los incidentes como el ocurrido en Motozintla son comunes durante las campañas electorales. Además, cuestionó la cobertura mediática de la violencia en la región, acusando a ciertos grupos de generar alarmismo.