Con solo 10 días restantes en el último periodo ordinario de la tercera legislatura, los diputados del Congreso de la Ciudad de México han acelerado la aprobación de reformas y puntos de acuerdo tras meses de inacción. La modificación más destacada es que todas las reformas aprobadas por el Legislativo local entrarán en vigor sin necesidad de ser publicadas en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México.
Después de varios meses en los que las sesiones terminaban sin aprobar dictámenes y con falta de quorum, este martes los diputados aprobaron dos exhortos y ocho modificaciones a leyes por unanimidad, con mínimo debate y reservas previamente acordadas entre todas las fuerzas políticas.
Entre las reformas, se modificó el Código Civil local para reducir a 15 días el tiempo para incluir registros en la base de datos de deudores alimentarios morosos. Los legisladores explicaron que el impago de pensiones alimenticias por parte de los padres es un problema estructural, con un aumento del 33 por ciento en expedientes ingresados en materia familiar entre 2020 y 2021, según datos del Tribunal Superior de Justicia.
Además, se aprobó un dictamen para incluir en los códigos Civil y Penal el delito de violencia vicaria, castigado con dos a seis años de prisión y el retiro de la patria potestad de los hijos. También se fortaleció la figura penal del feminicidio, endureciendo sanciones en casos de relaciones de subordinación o superioridad, incluyendo contextos religiosos, institucionales y de servicio.
El pleno exhortó al gobierno capitalino a diseñar un plan de revisión de la red hídrica para detectar y reparar tomas clandestinas, destacando que la ciudad tiene pocas fuentes sostenibles y se han detectado 124 tomas clandestinas entre 2018 y 2023.
Se aprobó un dictamen que permite a la persona con la diputación migrante participar remotamente en sesiones del pleno, comisiones o comités, asegurando su asistencia y voto. Asimismo, se renovó el Consejo Ciudadano del Sistema de Búsqueda de Personas de la Ciudad de México y se inscribirá la leyenda “Poder Judicial de la Ciudad de México” con letras de oro en los muros del recinto legislativo de Donceles y Allende.
Estos movimientos buscan recuperar el tiempo perdido y abordar el rezago legislativo en un esfuerzo por cumplir con las responsabilidades del Congreso antes del cierre del periodo legislativo.