amaneciendo.com.mx Tu ventana al mundo
El florecimiento de la temporada de mezquites ha comenzado en el Valle del Mezquital, una región impregnada de la presencia y los usos multifacéticos de este árbol en los hogares de Hidalgo.
A medida que avanzamos hacia finales de mayo, los frutos o vainas de mezquite empiezan su proceso de maduración, transformando su color de verde a una tonalidad café claro, con matices rojizos, mientras que sus semillas se impregnan de una pulpa que recuerda al sabor de los tamarindos.
Los lugareños disfrutan de estas vainas como una delicia recién cortada, saboreando su dulzura que se despliega en el paladar. La pulpa se separa de la fibra, esta última desechada una vez que pierde su sabor.
Además de ser un manjar para los habitantes locales, las vainas de mezquite son un valioso recurso alimenticio para el ganado, incluyendo puercos, vacas, toros, chivos y borregos, que se benefician de su valor nutricional como parte integral de su dieta diaria.
De acuerdo con datos oficiales, las vainas de mezquite no solo son una fuente de energía, sino que también pueden sustituir al maíz y a la harina de trigo en las raciones para animales, al contener hasta un 13% de proteína cruda, además de cantidades significativas de calcio, fósforo, hierro y vitaminas del complejo B.
Una vez caídas al suelo, las vainas son recolectadas por los agricultores para alimentar a sus animales, mezclándolas con zacate, alfalfa o avena picada en los comederos.
El mezquite, que da su nombre al Valle del Mezquital, no solo ofrece alimento y sombra frondosa, sino que su madera se utiliza para cocinar la barbacoa, gracias a sus aceites aromáticos. Sus raíces también tienen un papel importante, formando límites entre terrenos ejidales o de propiedad privada, al extenderse bajo tierra varios metros, marcando claramente los límites territoriales.
