En junio de 2024, la actividad industrial en México experimentó un crecimiento mensual de 0.4%, impulsado principalmente por un avance significativo en el sector manufacturero, que creció un 2.0% durante el mismo periodo. Este crecimiento contrasta con una caída notable en el sector de la construcción, que registró su primera contracción en 19 meses, con una disminución del 2.3%.
El sector de la construcción, especialmente las obras de ingeniería civil relacionadas con proyectos del gobierno federal, mostró una disminución del 5.7% en junio. Esta contracción es preocupante dado el énfasis que el gobierno ha puesto en proyectos de infraestructura como parte de su plan de crecimiento económico.
Aunque la minería y la generación de energía también mostraron caídas, el crecimiento en la manufactura evitó que el índice global se tornara negativo. Sin embargo, la desaceleración en la construcción y la minería sugiere un enfriamiento en áreas clave de la economía, lo que podría afectar las proyecciones de crecimiento para el resto del año.
Este escenario genera preocupaciones sobre la sostenibilidad del crecimiento económico en un contexto donde las industrias más dependientes de la inversión pública muestran signos de debilitamiento. Además, si bien las cifras globales son positivas, las dificultades en sectores como la construcción podrían tener implicaciones para la economía en general y el cumplimiento de las metas establecidas por la administración actual.