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El sistema Cutzamala, principal fuente de agua potable para la Ciudad de México y áreas circundantes, ha registrado una recuperación sorprendente gracias a las fuertes lluvias recientes. Este fenómeno, atribuido a la tormenta tropical Tlaloc, ha permitido que los niveles de las principales presas del sistema aumenten significativamente, luego de enfrentar una sequía prolongada que afectaba el suministro de agua desde hace varios meses.
Hasta el 10 de septiembre, las presas de Cutzamala mostraban un incremento notable en su almacenamiento, con cifras que superan el promedio de los últimos años para esta temporada. Este aumento llega en un momento crítico, ya que el déficit en el suministro de agua había generado preocupación entre las autoridades y los ciudadanos, quienes enfrentaban posibles restricciones en el servicio.
El impacto de las lluvias ha sido considerado un alivio, aunque expertos advirtieron que, a pesar de esta mejora, la situación aún requiere un manejo cuidadoso. A largo plazo, se necesitan estrategias sostenibles para asegurar que los recursos hídricos de la capital no se vean nuevamente comprometidos.
Las autoridades también han destacado la importancia de continuar monitoreando de cerca los niveles de las presas y promover medidas de uso eficiente del agua.
