Una persona ha perdido la vida y varias más están desaparecidas tras lluvias históricas que provocaron inundaciones y deslizamientos de tierra en la costa de Japón, justo en la misma zona que sufrió un devastador terremoto el día de Año Nuevo, según informaron las autoridades locales.
La agencia meteorológica japonesa lanzó el sábado su máxima alerta de emergencia para la prefectura de Ishikawa, instando a los habitantes a tomar precauciones extremas ante lo que calificaron como la lluvia más intensa registrada en la historia de la región. Aunque la alerta fue reducida el domingo por la mañana, la agencia solicitó a la población mantenerse en máxima vigilancia.
Las lluvias torrenciales hicieron que 16 ríos de la zona se desbordaran, reportó la emisora pública NHK. En la ciudad de Suzu, una persona perdió la vida cuando su casa fue arrastrada por un deslizamiento de tierra. Al menos seis personas están desaparecidas y decenas de miles han tenido que evacuar sus hogares.
El mal tiempo también dejó a más de 6,200 familias sin electricidad, confirmaron las autoridades.
La región ya estaba lidiando con la devastación y la desgracia tras el potente sismo de magnitud 7.5 que sacudió la península de Noto el 1 de enero, el cual causó cientos de muertes y una destrucción masiva de la que aún se está recuperando. Las fotografías muestran cómo las viviendas temporales levantadas para quienes perdieron sus hogares en el terremoto están ahora rodeadas de varios centímetros de agua turbia.
Según el Ministerio de Tierras, Infraestructura, Transporte y Turismo, cuatro trabajadores que realizaban labores de restauración tras el terremoto en la ciudad de Wajima están desaparecidos y podrían haber quedado atrapados en un deslizamiento de tierra. Los terremotos pueden dejar el terreno inestable y susceptible a más deslizamientos, especialmente después de intensas lluvias.
En la ciudad de Wajima, los residentes se afanan por retirar el barro de las calles y desatascar vehículos luego de las inundaciones que impactaron la zona el 22 de septiembre de 2024. También se reporta el colapso de un puente debido a las fuertes lluvias, intensificando aún más la crisis en esta región que ya se encontraba en dificultades.