Este lunes, el Ayuntamiento de Mineral de la Reforma enfrenta un problema inesperado: no puede recolectar basura debido al cierre del relleno sanitario de El Huixmí desde temprano. La administración local explicó que este cierre se debe a “cuestiones ajenas a las autoridades municipales”, pero es claro que la situación está fuera de sus manos.
En respuesta, ejidatarios y trabajadores de El Huixmí tomaron cartas en el asunto y se manifestaron en las oficinas de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales. El detonante fue el reciente anuncio de Mónica Mixteca Trejo, titular de esta dependencia estatal, quien señaló que el basurero de El Huixmí dejará de operar este año debido a que ha llegado al fin de su vida útil tras 30 años de servicio en la zona metropolitana.
Los empleados del relleno están preocupados: temen quedarse sin empleo y exigen una solución para su futuro laboral, ya que este lugar ha sido por décadas su fuente de ingresos.