En un escenario devastador, más de 2,700 vidas se han perdido y más de 12,500 personas han resultado heridas a causa de los ataques de Israel en el Líbano en el último año, tras el inicio de los enfrentamientos entre el Estado judío y el grupo chií Hizbulá. Esta información fue revelada hoy por fuentes oficiales.
El Centro de Operaciones de Emergencia del Ministerio de Salud Pública de Líbano informó que estas cifras se han registrado desde que comenzó la agresión israelí el 8 de octubre, justo un día después de que estallara el conflicto en la Franja de Gaza.
En el último reporte, se actualizó el balance tras un domingo trágico, donde se contabilizaron 38 muertes y 124 heridos en varios bombardeos israelíes en distintas partes del Líbano. Las áreas más afectadas fueron el sur del país, con 23 muertes, seguido de Nabatiye (9), el Valle de la Bekaa (2) y Baalbek-Hermel (4) en el noreste.
Desde el inicio de la agresión, se ha indicado que 532 mujeres, 2,051 hombres y 157 menores han perdido la vida. Además, 1,129 niños y niñas han sufrido heridas de diversa gravedad.
El Ministerio de Salud Pública también denunció que 168 trabajadores de la salud han fallecido en este último año, y otros 232 han quedado heridos, mientras que se han reportado daños en 239 ambulancias, 79 centros de salud y 38 hospitales debido a los ataques.
La gran mayoría de las víctimas, cerca de 1,600 según informes locales, ha ocurrido desde el 23 de septiembre, cuando Israel intensificó su campaña de bombardeos sin precedentes, enfocándose en el sur, el este y los suburbios del sur de Beirut.
Esta agresión ha causado el desplazamiento de más de 1.2 millones de personas, aunque solo el 15% de ellas se han registrado en centros de acogida dispuestos por el Gobierno libanés, los cuales se encuentran completamente saturados.