La Pensión para el Bienestar, destinada a los adultos mayores de 65 años en adelante, se ha consolidado como un programa de apoyo social que proporciona una ayuda económica de 6 mil pesos bimestrales, pagados directamente a los beneficiarios. Este programa, ahora elevado a rango constitucional, obliga al Estado mexicano a garantizar su cumplimiento, independientemente del gobierno en turno.
Con el último pago programado para el bimestre noviembre-diciembre de 2024, se espera que el aumento para la Pensión Bienestar entre en vigor en 2025. Este ajuste está diseñado para mantener el poder adquisitivo de los beneficiarios frente a la inflación, un compromiso que las autoridades han reiterado a lo largo de los años.
La presidenta Claudia Sheinbaum ha mencionado que el incremento de la pensión debe superar los niveles de inflación actuales, aunque hasta la fecha no se ha anunciado el porcentaje exacto de aumento para 2025. Históricamente, la pensión ha tenido incrementos anuales del 25 por ciento, y muchos esperan que esta tendencia se mantenga o incluso se supere el próximo año.
El hecho de que la Pensión para el Bienestar esté blindada por la Constitución refuerza su carácter de obligación estatal, lo cual significa que, sin importar cambios en la administración o en el contexto político, los adultos mayores seguirán recibiendo este apoyo. Esto ha sido visto como un avance significativo en la protección social de uno de los sectores más vulnerables de la población.
Sin embargo, el programa también ha sido objeto de críticas y dudas sobre su sostenibilidad a largo plazo, especialmente considerando los desafíos económicos del país y la necesidad de incrementos constantes para contrarrestar la inflación. A pesar de estos cuestionamientos, el gobierno asegura que la Pensión Bienestar seguirá cumpliendo con sus objetivos de asistencia económica y social para los adultos mayores en el país.
Se espera que las autoridades revelen el nuevo monto del incremento en las próximas semanas, ofreciendo así mayor claridad a los beneficiarios sobre el monto exacto que recibirán en el nuevo ciclo de pagos del año 2025.