¿Te ha pasado que te cuesta arrancar con algo? Ese curso que quieres tomar o esa tarea que llevas días aplazando.
A veces, la pereza, el miedo al fracaso o simplemente la desidia nos hacen perder tiempo valioso. Pero, ¡tranquilo! Los japoneses tienen técnicas asombrosas que pueden ayudarte a superar estos bloqueos y encontrar la motivación que necesitas. Aquí te las contamos:
1. Ikigai: Tu razón para levantarte cada mañana 🌅
Este concepto japonés no tiene una traducción directa, pero podría resumirse como “la felicidad de vivir”. Es lo que da sentido a tus días, esa pasión que te hace despertarte con alegría.
Para entenderlo mejor, imagínate un diagrama de Venn que combina:
- Lo que amas.
- En lo que eres bueno.
- Lo que el mundo necesita.
- Por lo que te pueden pagar.
El neurocientífico Ken Mogi explica que el ikigai puede ser algo tan sencillo como cuidar una planta, aprender algo nuevo o compartir tiempo con una mascota. ¡Encuentra lo que te mueve y agárrate de eso!
2. Kaizen: Pequeños pasos, grandes cambios 🪜
Nada de pretender ser experto de un día para otro. El kaizen es una filosofía que se basa en hacer mejoras continuas, paso a paso.
Se originó en Japón tras la Segunda Guerra Mundial y es un principio clave en empresas como Toyota. ¿La idea? “Kai” significa cambio y “Zen” para mejor.
¿Cómo aplicarlo? Fíjate metas pequeñas cada día, celebra tus logros y no te abrumes por la meta final. Cada pequeño avance cuenta.
3. Técnica Pomodoro: Productividad en bloques 🍅
Ideal para cuando las tareas parecen interminables. Esta técnica, creada por el italiano Francesco Cirillo, se popularizó en Japón por su efectividad.
¿Cómo funciona?
- Trabaja 25 minutos sin distracciones.
- Tómate 5 minutos de descanso (revisa tus mensajes o toma un snack).
- Repite el ciclo.
Estos bloques te ayudan a mantenerte enfocado y a evitar distracciones, además de premiar a tu cerebro con mini recompensas.
4. Hara Hachi Bu: Come con medida 🍴
Originaria de Okinawa, esta técnica no solo habla de comida, sino de cómo evitar la pereza después de una comida pesada.
El consejo es: come solo hasta sentirte al 80 % lleno. Así, evitas la somnolencia postcomida y te mantienes con energía para tus tareas.
5. Shoshin: La mente de principiante 🧠
¿Sientes que sabes demasiado sobre un tema? ¡Cuidado! Según el budismo zen, mantener una mente abierta y curiosa, como la de un principiante, es clave para aprender y crecer.
Este enfoque, defendido por el monje Shunryū Suzuki, fomenta la creatividad y la perseverancia. Olvídate de los prejuicios y atrévete a experimentar como si fuera la primera vez.
6. Wabi-Sabi: Abraza la imperfección 🌸
En lugar de obsesionarte con la perfección, el wabi-sabi te invita a aceptar lo imperfecto y transitorio. Ya sea un proyecto, un hobbie o incluso una tarea del hogar, recuerda que “lo perfecto es enemigo de lo bueno”.
Mientras buscas que todo quede impecable, podrías estar perdiendo tiempo valioso. Mejor, disfruta del proceso y aprende de cada paso.