La Secretaría de Contraloría ha dado un paso importante en la transición por la desaparición del Instituto de Transparencia de Hidalgo (Itaih). Según su titular, Álvaro Bardales Ramírez, 37 empleados de este órgano autónomo serán reubicados dentro de la Secretaría, garantizando que la eficiencia en el acceso a la información y la transparencia no se vea afectada.
En una entrevista con los medios, Bardales aclaró que 30 de los trabajadores se integrarán a tres áreas clave dentro de la Dirección de Transparencia, cubriendo roles similares a los que desempeñaban en el Itaih, como tecnologías, contraloría interna y jurídico. Los 7 restantes ocuparán puestos en áreas como administración y comunicación social, entre otras.
Uno de los temas más críticos que heredó el Itaih, según el funcionario, es el rezago de 250 casos jurídicos de ciudadanos que sienten que sus solicitudes de información no se han resuelto a tiempo. “Nosotros, con menos recursos, vamos a lograr ser más eficaces en la atención de estos asuntos”, mencionó Bardales, destacando que las áreas que ahora usa el Itaih estarán a su disposición en la Secretaría.
También es importante mencionar que la Contraloría se hará cargo del presupuesto del Itaih, que anteriormente se destinaba a este instituto (unos 20 millones de pesos). Ahora, esos fondos se usarán para cubrir los gastos de nómina de los trabajadores que se reubiquen, además de generar un ahorro del 25% en términos de alquiler de edificios y otros costos operativos.
Sobre el futuro de los tres comisionados del Itaih, Bardales comentó que aún no se sabe qué sucederá con ellos, ya que los recursos de revisión serán manejados por el personal jurídico de la Contraloría.
“Vamos a seguir cumpliendo las mismas funciones que el Itaih, pero con una mayor eficacia. La transparencia va a estar mejor administrada dentro de la Contraloría”, aseguró el titular, quien también remarcó que se mantendrán los comités de transparencia y funciones sustantivas.