Aún está pendiente la disputa legal por el terreno donde se construyó el Banco del Bienestar en San Felipe Orizatlán, lo que ha impedido que la institución vuelva a operar desde el año pasado. El delegado de los Programas del Bienestar en Hidalgo, Abraham Mendoza Zenteno, explicó que el predio sigue siendo un tema de litigio.
Según informó Mendoza, el terreno había sido donado por la administración pasada encabezada por Erika Saab, lo que permitió que la Sedena construyera el banco en la cabecera municipal. Sin embargo, no pasó mucho tiempo antes de que los comerciantes de la zona presentaran un amparo ante la justicia, reclamando ser los propietarios del terreno tras recibir la donación del ayuntamiento años atrás.
El delegado aclaró que “hace falta certeza jurídica” sobre quién es el dueño legítimo del terreno, ya que ni el ayuntamiento ni los comerciantes tienen la personalidad jurídica suficiente para definirlo. Mientras esto se resuelve, el banco no podrá operar. Este caso es uno de los pocos que aún enfrenta dificultades, ya que se planeaban 119 sucursales del Banco del Bienestar en la administración pasada, y solo este caso ha tenido problemas.
¿Hay esperanza de solución? Mendoza está optimista, pues el actual presidente municipal, Carlos César Pérez Escamilla, ha mostrado interés en solucionar el conflicto y ha hablado con los comerciantes, quienes estarían dispuestos a ceder el predio para que el banco pueda funcionar sin problemas.
Por otro lado, el delegado señaló que el servicio no se ve afectado, ya que el antiguo Banco Bansefi sigue operando como Banco del Bienestar, y además hay otras dos instituciones bancarias de gobierno en el municipio que permiten a los beneficiarios de los programas sociales retirar sus recursos sin complicaciones.
Finalmente, se aclaró que los comerciantes cuentan con una presunta donación del terreno que data de hace unos 15 años, pero Mendoza no está seguro de que ese trámite esté registrado en la presidencia municipal. En cualquier caso, subrayó que la falta de certeza jurídica en trámites administrativos es una problemática común en los municipios debido al desconocimiento sobre cómo manejar estos procesos.