Este sábado 18 de enero, se llevó a cabo una reunión privada en Pachuca, en un hotel de renombre, donde el secretario de Organización del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de Morena, Andrés Manuel López Beltrán, fue el encargado de liderar el encuentro con las Coordinaciones Operativas Territoriales de Morena en Hidalgo. Lo curioso de la cita fue la ausencia del líder estatal, Marco Rico, quien no asistió al evento.
En el encuentro, estuvieron presentes figuras clave como Mónica Marroquín, Coordinadora de Promoción en el estado, y Estefany Correa, Coordinadora de Circunscripción, quienes se unieron a la jornada de trabajo, centrada en la credencialización de militantes. López Beltrán, hijo del presidente Andrés Manuel López Obrador, explicó que esta reunión forma parte de un esfuerzo más grande para fortalecer el programa de afiliación a Morena en todas las secciones electorales del país.
El objetivo en Hidalgo es claro: 250 mil nuevas afiliaciones durante este proceso, con el enfoque principal en visitar a los ciudadanos puerta por puerta para promover la credencialización. Este esfuerzo se enmarca dentro de un proyecto nacional que busca afiliar a 10 millones de personas a lo largo de todo el país, un plan anunciado oficialmente por la dirigencia nacional el pasado 20 de diciembre de 2024.
Sin embargo, en el ambiente político local, Marco Rico ha sido cuestionado por algunos miembros de la militancia, quienes lo acusan de intentar “tomarse” el control de este proceso de afiliación y credencialización en el estado. 👀