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El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, propuso que Egipto y Jordania reciban a los palestinos que viven en Gaza, calificando la situación de esta región como un “lugar de demolición”. Durante una llamada reciente con el rey Abdalá de Jordania, Trump expresó: “La Franja de Gaza es un desastre total, ¿podrías aceptar más personas?”. Además, mencionó que haría la misma solicitud al presidente egipcio.
El expresidente sugirió que este movimiento podría ser temporal o incluso permanente, lo que ya ha generado reacciones intensas. Hamás, organización que controla Gaza, rechazó tajantemente la idea. “Nuestro pueblo no aceptará ofertas bajo ningún pretexto”, aseguró Bassem Naim, miembro de la oficina política del grupo.
🎙️ Trump, en declaraciones hechas a bordo del Air Force One, fue directo: “Estamos hablando de un millón y medio de personas. Todo está destruido, la gente está muriendo ahí, y pienso que lo mejor sería buscarles un lugar donde puedan tener paz.”
El drama humanitario en Gaza.
La devastación en Gaza es abrumadora: Naciones Unidas estima que el 60% de las infraestructuras han sido destruidas durante 15 meses de enfrentamientos con Israel. “No hay nada allí, solo ruinas”, dijeron algunos desplazados. Sin embargo, los palestinos insisten en que no dejarán su tierra. Abu Yahya Rashid, desde Jan Yunis, lo resumió así: “Esta tierra es nuestra herencia. Solo nos iremos como cadáveres”.
Jordania y Egipto han sido históricamente destinos para palestinos desplazados, pero ambos países han mostrado resistencia a recibir más refugiados. En 2023, el presidente egipcio Abdel Fattah al-Sisi dejó claro que se opone a cualquier desplazamiento hacia la península del Sinaí. “La solución es un Estado palestino independiente”, aseguró.
Reacciones y más tensiones.
Algunos sectores de la política israelí, especialmente los de extrema derecha, han apoyado la idea de Trump. Itamar Ben-Gvir, político israelí, elogió la propuesta de traslado, calificándola como una oportunidad para “promover la emigración voluntaria”. Sin embargo, estas posturas están lejos de ser aceptadas por la mayoría de los palestinos.
Por otro lado, Estados Unidos, principal aliado de Israel, sigue siendo el proveedor clave de armamento para el país. Trump afirmó haber levantado restricciones que impedían el envío de bombas, destacando que “Israel las pagó y las necesita.”
La situación sigue siendo tensa, y mientras los desplazados intentan regresar a lo que queda de sus hogares, el futuro de Gaza permanece incierto.
