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El alcalde de San Felipe Orizatlán, Carlos César Pérez Escamilla, está preocupado por una fuga de agua en la presa municipal. Si no se arregla pronto, la cabecera municipal y sus comunidades podrían quedarse sin agua durante la temporada de estiaje, que ya está a la vuelta de la esquina.
El alcalde y el equipo de Obras Públicas hicieron una inspección en la presa y encontraron una fuga importante que necesita repararse urgente. Pérez Escamilla detalló que, tras las lluvias de la temporada pasada, la presa está llena de grava, piedras y arena, lo que complicará un poco las reparaciones. Además, el deslizamiento de terreno que provocó la creciente pasada dejó el sistema un tanto obsoleto, pero ya están trabajando para evitar que siga perdiéndose agua.
Por ahora, el trabajo de reparación va a cortar el suministro de agua por un rato, así que el alcalde pidió a la gente que almacene agua para no verse en aprietos. Las comunidades y colonias que queden sin servicio recibirán agua con pipones mientras se soluciona el problema.
Si la cosa se complica aún más, Pérez Escamilla no descarta la posibilidad de construir pozos artesanales en puntos clave para asegurarse de que no falte el agua durante el calorón.
Por suerte, hasta el momento no ha habido escasez de agua en el municipio, y el alcalde confía en que este año no será la excepción. Pero, eso sí, hizo un llamado a todos para que cuiden el agua, porque la cosa está algo difícil con la situación.
