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En Frontera Comalapa, Chiapas, la situación es desesperada. Dos organizaciones criminales enfrentadas han dejado a las familias escasas de alimentos, gas LP y gasolina desde principios de septiembre. La crisis es tan grave que los productos básicos llegan a la ciudad por métodos inusuales, como lanchas desde Socoltenango. En medio de esta difícil situación, miles de personas en Siltepec han marchado en busca de paz en la Sierra.
La falta de suministros esenciales ha obligado a los residentes a recurrir a medidas extremas para sobrevivir. La energía eléctrica y la telefonía celular han dejado de funcionar en la cabecera municipal, lo que ha llevado a la descomposición de alimentos almacenados en refrigeradores. Algunos habitantes han logrado cargar sus teléfonos utilizando generadores de energía a gasolina y comprar fichas de internet para comunicarse con sus seres queridos.
La ciudad de Frontera Comalapa, con una población de 25 mil personas, se encuentra en un estado de miedo constante debido a la presencia de hombres armados que transitan por las noches. Temen que los enfrentamientos entre las dos organizaciones criminales estallen en cualquier momento. Aunque la razón detrás de la interrupción de la energía eléctrica aún es desconocida, los residentes especulan que las líneas de tendido en la Sierra podrían haber sido dañadas por desconocidos. La situación es un llamado urgente a restaurar la paz en la región.
