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En un trágico suceso, hombres armados llevaron a cabo el brutal asesinato de Bruno Plácido Valerio, líder de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), junto con su acompañante y chofer, en las inmediaciones de la Secretaría de Salud de Guerrero en Chilpancingo. Este violento atentado conmocionó a la región y ha levantado preocupaciones sobre la creciente violencia en Guerrero.
El lamentable incidente tuvo lugar poco antes de las 17:00 horas locales y fue perpetrado por agresores no identificados. A pesar de la pronta llegada de paramédicos de la Secretaría de Protección Civil estatal, no pudieron salvar las vidas de Plácido Valerio y su compañero, cuyos cuerpos fueron trasladados al Servicio Médico Forense (Semefo).
Hasta el momento, las autoridades de la Fiscalía General del Estado (FGE) no han proporcionado información oficial sobre los acontecimientos. Este asesinato se suma a la ola de violencia que afecta a Guerrero, un estado que ha enfrentado desafíos relacionados con la delincuencia organizada.
Bruno Plácido Valerio, además de liderar la UPOEG, había anunciado la reorganización de este grupo armado a principios de este año. A pesar de enfrentar problemas de salud debido a la diabetes, Plácido Valerio estaba activo en la gestión social y había abogado por la reactivación de la UPOEG en respuesta a la falta de seguridad por parte de las instituciones gubernamentales.
La UPOEG se había establecido originalmente como una respuesta a la creciente delincuencia en la región de la Costa Chica en Guerrero. A pesar de contar con medidas cautelares en el pasado, Bruno Plácido Valerio fue visto sin personal de seguridad y sin vehículo blindado en los últimos tiempos.
Este trágico asesinato subraya la urgente necesidad de abordar la violencia criminal en Guerrero, que se ha expandido en diferentes regiones del estado y afecta a la población en general. El asesinato de Plácido Valerio y su chofer se produce en el contexto de otros ataques violentos en Chilpancingo en un lapso de menos de dos horas, lo que refleja la gravedad de la situación de seguridad en la región.
