El presidente Andrés Manuel López Obrador firmó la promulgación de la reforma que pone fin a 13 fideicomisos del Poder Judicial. Este decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación establece un plazo de 120 días hábiles para concluir el proceso de liquidación de estos fondos, que acumulan más de 15 mil millones de pesos. Los remanentes de estos fideicomisos deberán ser devueltos a la Tesorería de la Federación después de cumplir con las obligaciones legales y contractuales correspondientes.

Uno de los aspectos más discutidos durante el debate y aprobación de esta reforma fue la preservación de los recursos aportados por los trabajadores del Poder Judicial de la Federación (PJF). El artículo segundo transitorio detalla que los órganos del PJF que son fideicomitentes deberán coordinarse con las instituciones fiduciarias para liquidar estos fondos en un plazo máximo de 120 días a partir de la entrada en vigor del decreto.
Los recursos restantes y sus ganancias, independientemente del ejercicio fiscal en que se originaron, deben ser entregados a la Tesorería de la Federación. La Secretaría de Hacienda y Crédito Público los destinará a programas que cumplan con el Plan Nacional de Desarrollo.
Además, el Poder Judicial de la Federación debe publicar un informe detallado por cada fideicomiso extinto, indicando los montos devueltos a la Tesorería, en cumplimiento de principios de transparencia y rendición de cuentas. El PJF tendrá un máximo de siete días hábiles después de realizar el entero a la Tesorería de la Federación para presentar este informe.