Después de casi seis años de dar vueltas legales, finalmente Patrick Crusius, el hombre detrás del terrible tiroteo en un Walmart de El Paso, se declarará culpable de asesinato este lunes. Con esto, evitará la pena de muerte y será condenado a cadena perpetua sin derecho a salir.

El fiscal de distrito del condado, James Montoya, confirmó que se le ofreció un acuerdo para cerrar el caso y ahorrarle más sufrimiento a las familias de las víctimas. La mayoría de ellas ya solo querían ponerle punto final al proceso.
Crusius, que actualmente tiene 26 años, ya había recibido 90 cadenas perpetuas federales en 2023 por delitos de odio y posesión de armas. Desde entonces, está tras las rejas, y ahora se espera que cumpla el resto de su condena en una cárcel estatal de Texas.
Un crimen con tintes racistas.
El ataque ocurrió el 3 de agosto de 2019, cuando Crusius tenía 21 años. Manejó más de 10 horas desde el área de Dallas hasta El Paso para llevar a cabo un tiroteo en un Walmart muy frecuentado por familias mexicanas y estadounidenses.
De acuerdo con las autoridades, llevaba orejeras para silenciar los disparos y llegó armado con un rifle tipo AK. Primero disparó en el estacionamiento y luego entró a la tienda, donde asesinó a nueve personas en la zona de cajas y pasillos. Incluso disparó contra un coche al salir, matando a un hombre e hiriendo a su esposa.

Al poco tiempo fue capturado y, según los reportes, confesó sin titubear que su objetivo eran los mexicanos. Antes del ataque, publicó un mensaje en línea donde aseguraba que su acto era “una respuesta a la invasión hispana de Texas”.
En redes sociales, era conocido por publicar cosas como #BuildTheWall y aplaudir las políticas migratorias del entonces presidente Donald Trump.
Las víctimas y el dolor que no se olvida.
Entre las 23 personas fallecidas había de todo: desde un joven deportista de 15 años hasta abuelitos que solo iban de compras. También perdieron la vida Jordan y Andre Anchondo, quienes murieron protegiendo a su bebé de dos meses, que milagrosamente sobrevivió.
Guillermo “Memo” García fue otra víctima fatal. Estaba con su esposa Jessica Coca García recaudando fondos en el estacionamiento. Ella sobrevivió con heridas en la pierna, pero él falleció nueve meses después, elevando el número de muertos.
Una semana tras el ataque, Jessica dio un emotivo discurso desde su silla de ruedas, denunciando el racismo: “Siempre quise creer que no existía, pero claramente sí”.

Cierre a un proceso larguísimo.
Montoya explicó que tomó la decisión del acuerdo porque muchas familias ya no querían seguir reviviendo el trauma. Aunque personalmente cree que Crusius merece la pena de muerte, entendió que un juicio podría tardar hasta 2028.
Desde el tiroteo, el caso ha pasado por cuatro fiscales de distrito, uno de ellos incluso renunció en 2022 por la presión social. La pandemia también complicó aún más los tiempos judiciales.
Stephanie Meléndez, hija de una de las víctimas, dijo que en un principio deseaba la pena máxima para el atacante, pero luego solo quería que todo acabara:
“Era como revivir la pesadilla cada vez… ir a audiencias, escuchar lo mismo una y otra vez. Ya era suficiente.”