#Alvin en ruta: la #Tormenta que ya anda en el #Pacífico y qué zonas tiene en la mira.

La tormenta tropical Alvin, que empezó a formarse el jueves, ya está rondando a unos 420 km al suroeste de Cabo Corrientes, Jalisco, y avanza firme hacia el noroeste por el Pacífico, con la mira puesta en Baja California Sur, reporta el Servicio Meteorológico Nacional de México (SMN).

Este ciclón es el primero con nombre de la temporada 2025 en el Pacífico, según la lista oficial que lleva el SMN junto con la Organización Meteorológica Mundial.

Según el último reporte del SMN, emitido a las 6:15 p.m. hora del centro de México, Alvin se mueve a una velocidad de 17 km/h y tiene vientos sostenidos de 85 km/h, con rachas que pueden alcanzar hasta 100 km/h. A la vez, el Centro Nacional de Huracanes de EE.UU. comenta que se espera que Alvin se vaya debilitando poco a poco y probablemente deje de ser tormenta para el sábado, convirtiéndose en una baja presión remanente.

Pero ojo, porque durante los próximos dos días, las olas y marejadas que trae Alvin afectarán las costas del centro-oeste y suroeste de México, además del sur de la península de Baja California. Esto podría generar oleaje peligroso y corrientes de resaca que pueden ser mortales, advierten las autoridades de Estados Unidos.

El SMN detalla que para las próximas 24 horas, los estados con mayor impacto serán:

• Jalisco, Colima y Michoacán: lluvias muy fuertes (50 a 75 mm), vientos costeros de 40 a 50 km/h con rachas de 60 a 80 km/h, y olas que podrían alcanzar hasta 5 metros.
• Nayarit: lluvias fuertes (25 a 50 mm), viento de 20 a 30 km/h con rachas hasta 60 km/h, y oleaje de 3 a 4 metros.
• Baja California Sur: lluvias y chubascos (5 a 25 mm), vientos de 20 a 30 km/h con rachas de hasta 60 km/h, y olas que podrían subir de 1-2 metros a 3 metros.
• Sinaloa: lluvia ligera a moderada (5 a 25 mm), viento de 20 a 30 km/h con rachas de hasta 60 km/h.

Además, junto con las lluvias, se esperan descargas eléctricas e incluso posible granizo. Esto puede provocar que los niveles de ríos y arroyos suban, además de deslaves, encharcamientos e inundaciones en las zonas más bajas.

Todo esto sucede justo cuando la temporada de huracanes está arrancando con fuerza, y se espera que en el Atlántico la actividad esté por encima de lo normal. La situación se complica porque las agencias meteorológicas y de emergencias en Estados Unidos ya están saturadas, lo que podría dejar a millones de personas más vulnerables ante estos fenómenos.