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En cumplimiento de sus advertencias, el presidente López Obrador allanó el camino para la expropiación de los terrenos de Calica, al sur de Playa del Carmen, después de que la Semarnat iniciara el proceso de declaración de zona natural protegida. Este movimiento responde a la falta de aceptación por parte de la trasnacional Vulcan Materials Company de la oferta gubernamental de 6,500 millones de pesos por sus tierras. La extensión propuesta para la nueva área natural protegida es de 2,387 hectáreas, abarcando completamente los terrenos de la empresa, que suman alrededor de 1,500 hectáreas.
La advertencia de López Obrador sobre la posible expropiación surgió en 2022, tras clausuras practicadas a Calica, y ahora se materializa con la consulta del estudio justificativo para la declaración de área natural protegida. Este proceso, anunciado en el Diario Oficial de la Federación, concede a los interesados 30 días para opinar sobre el estudio antes de que el ejecutivo pueda emitir el decreto que permita la expropiación.
Vulcan Materials Company, tras rechazar la oferta gubernamental y solicitar la intervención del embajador estadounidense, está actualmente analizando el estudio elaborado por la Conanp. Calica, además de enfrentar clausuras y demandas civiles por daños ambientales y a la salud, mantiene demandas de amparo y una solicitud de más de 1,500 millones de dólares por daños y perjuicios ante el Ciadi, bajo las reglas del extinto TLCAN.
Este proceso de declaratoria de área natural protegida y eventual expropiación podría desencadenar nuevos litigios de Calica contra el gobierno mexicano, complicando aún más una disputa que se originó en 1986 con una concesión de explotación de roca caliza. La empresa, representada por Calizas Industriales del Carmen, ha enfrentado múltiples clausuras y cuestionamientos por prácticas desmedidas en la extracción de material pétreo.
