La situación de los incendios forestales en Hidalgo se salió de control este 2024, con un aumento del 173.1 % en la superficie afectada en comparación con el año anterior. 🌳 Acaxochitlán y Zacualtipán se llevan el deshonroso primer lugar en cantidad de siniestros, según datos de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales de Hidalgo (Semarnath).
Durante este año, se registraron 185 incendios, 19 más que los 166 reportados en 2023. Sin embargo, el dato más alarmante es la cantidad de terreno quemado: 4,643 hectáreas, un incremento abrumador frente a las 1,700 hectáreas afectadas el año pasado.
De esas áreas, la mayor parte correspondió a arbustos con 2,442 hectáreas, seguidas de pastizales y material herbáceo con 900 hectáreas. También se quemaron 538 hectáreas de hojarasca, mientras que el arbolado adulto y de renuevo, aunque menos extenso, representó un impacto ambiental más grave con 491 y 270 hectáreas, respectivamente.
Los municipios más golpeados fueron Acaxochitlán, que lideró con 51 incendios, seguido por Zacualtipán con 22 y Cuautepec con 13. Otros lugares como Tlahuiltepa y Singuilucan reportaron 11 siniestros cada uno, mientras que Almoloya registró 9. Entre los menos afectados, Tulancingo, Apan y Tenango de Doria contabilizaron 7 incendios cada uno.
¿Y qué está causando todo esto? Según la Semarnath, el 29 % de los incendios son provocados intencionalmente, mientras que el 18 % tiene su origen en actividades agrícolas, como quemas de terrenos. Otros factores incluyen causas desconocidas (14 %), actividades pecuarias, fumadores, quema de basureros y hasta festividades y rituales.
Este panorama deja clara la urgencia de concientizar y tomar medidas preventivas para evitar que el fuego siga arrasando con el patrimonio natural de Hidalgo.