¿Sabías que hace 700 años, en el corazón de lo que hoy conocemos como Ciudad de México, existía una ciudad impresionante que dejó boquiabiertos a los españoles? Sí, estamos hablando de Tenochtitlan, la capital del imperio mexica.

En 1520, el conquistador español Hernán Cortés se quedó completamente asombrado cuando pisó esta ciudad flotante sobre el lago de Texcoco. En su diario, describía cómo las calles de Tenochtitlan estaban tan bien hechas que eran más anchas que las de muchas ciudades europeas. ¡Y por si fuera poco, la ciudad tenía calzadas de tierra que conectaban todas sus islas y canales llenos de canoas! 🌊🚣♂️
En ese entonces, Tenochtitlan era el centro de la civilización mexica y uno de los lugares más avanzados del mundo. La ciudad era un hervidero de comercio, con mercados donde se vendían desde alimentos hasta joyas y hasta plumas exóticas. En una sola plaza, ¡se llegaban a reunir más de 70,000 personas vendiendo y comprando! Imagínate el desmadre que debía haber.

A pesar de que se ha discutido cuándo exactamente se fundó Tenochtitlan, la fecha oficial que se maneja en México es el 13 de marzo de 1325. Y este 2025, la antigua ciudad mexica está celebrando su séptimo centenario de historia. 🎉
Un vistazo 3D a la Tenochtitlan que nunca vimos.
Recientemente, un artista neerlandés llamado Thomas Kole hizo una recreación de cómo era Tenochtitlan a través de un proyecto digital llamado “Retrato de Tenochtitlan”. Después de un año y medio de trabajo y con la ayuda de expertos, Kole nos mostró cómo luciría la ciudad si pudiéramos viajar en el tiempo. Lo más impresionante es que Tenochtitlan no era solo una ciudad flotante, ¡era un ejemplo de ingeniería avanzada! Las calles, los templos y hasta los mercados estaban súper organizados.

La idea era simple, pero brillante: los mexicas construyeron canales para conectar todas las islas donde vivían, y su sistema de agricultura en chinampas (como jardines flotantes) les daba todo lo que necesitaban. ¡No dependían de nadie más para alimentarse!
El legado de los mexicas sigue vivo.
Aunque los españoles se llevaron lo mejor de Tenochtitlan y la destruyeron durante la conquista, el sistema que crearon sigue presente, aunque de forma un poco diferente. Si alguna vez te has atorado en el tráfico o te has inundado en la CDMX, sabes de lo que hablo. Aunque la ciudad fue fundada sobre un lago, hoy enfrentamos problemas de escasez de agua y hundimiento, algo que los mexicas lograban manejar mucho mejor con su conocimiento ancestral.

Es impresionante cómo, cinco siglos después, podemos seguir aprendiendo de los mexicas, su forma de organizar la ciudad, el comercio y su respeto por el agua.
Aunque Tenochtitlan fue solo una parte de un sistema más grande que incluía otras ciudades como Texcoco e Iztapalapa, es innegable que lo que hicieron fue algo único en su época. Así que, cuando caminemos por las calles de la Ciudad de México, recordemos que estamos caminando sobre una historia de ingenio, lucha y un legado que aún se siente en el aire.
¡Qué viva Tenochtitlan y lo que nos dejó!