Trabajadores del Poder Judicial han manifestado inquietudes sobre posibles presiones de Morena hacia el ministro Alberto Pérez Dayán, a quien acusan de haberse “doblegado” ante el partido oficialista al votar en contra de la invalidación de la controvertida reforma judicial impulsada por la administración de Andrés Manuel López Obrador. Patricia Aguayo, representante de los empleados del Poder Judicial, señaló que esta decisión se relaciona con investigaciones en curso que estarían siendo utilizadas como palanca para influir en el voto del ministro.
Aguayo, en una entrevista radiofónica, detalló que estas investigaciones abiertas contra Pérez Dayán habrían sido aprovechadas por Morena para disuadirlo de anular la reforma judicial, dejando al Poder Judicial en una posición vulnerable frente al Ejecutivo. Esta información, aunque no corroborada oficialmente, ha impulsado a los trabajadores a investigar el caso a fondo, advirtiendo que tomarán medidas para esclarecer el posible vínculo entre estas investigaciones y el voto del ministro.
En la sesión reciente de la Suprema Corte de Justicia, el ministro Pérez Dayán fue apodado “el Yunes de la Corte” por parte de los trabajadores, quienes consideran su decisión como un golpe al Poder Judicial y un respaldo inesperado a la ideología de la 4T. Aguayo destacó que este giro inesperado ha generado una gran decepción, afirmando que el pueblo mexicano no merece que sus instituciones sean manipuladas de esta manera.
Según Aguayo, el Plan B de Claudia Sheinbaum era presionar a un ministro de la Suprema Corte para asegurar la supervivencia de la reforma judicial, lo que ha incrementado el descontento y la frustración entre los trabajadores del Poder Judicial. La representante denunció que esta estrategia refleja una postura de “aplanadora” por parte de Morena, poniendo en riesgo la independencia judicial en México.
Con la resolución de la Corte ya emitida, Aguayo confirmó que el paro en el Poder Judicial está próximo a concluir, dado que las expectativas que sustentaban la protesta se han agotado. Sin embargo, advirtió que la reforma sigue representando una amenaza directa a la autonomía de la institución, ya que busca someter al Poder Judicial a la influencia del partido en el poder, dejando a la ciudadanía sin una defensa legal efectiva.
Finalmente, Aguayo subrayó que el propósito de esta reforma judicial es consolidar el control sobre el Poder Judicial de la Federación, afectando así la capacidad de los mexicanos para acceder a un sistema de justicia independiente y poniendo en peligro sus derechos fundamentales.