amaneciendo.com.mx Tu ventana al mundo
El suministro de borregos en la región enfrenta un desafío crucial, ya que la demanda mensual de 15 mil ovinos supera con creces la oferta actual de dos mil. A pesar de la presencia de alrededor de 80 criadores y engordadores ovinos en la zona, la brecha entre la oferta y la demanda ha llevado a considerar alternativas para mantener las ganancias en el municipio.
El secretario de Desarrollo Agropecuario, Eulogio Rodríguez Mendoza, subrayó la necesidad de que los productores ovinos se unan para alcanzar las 24 mil cabezas de borregos mensuales requeridas. Esto permitiría atender la demanda de 13 mil borregos al mes y evitar que los paisanos barbacoeros se vean obligados a adquirirlos en otros estados.
Estos pequeños ganaderos, que poseen entre cinco y 200 animales, actualmente solo aportan dos mil borregos al mes. Además de este desequilibrio, enfrentan el desafío adicional de la sequía, que ha agotado las reservas de forraje de 2022 y 2023. Ante la escasez, algunos podrían verse obligados a vender sus animales para evitar que sufran hambre y sed.
El secretario advirtió sobre la posibilidad de un desabasto continuo del ingrediente principal para el tradicional platillo de barbacoa si no se toman medidas. Considerando la sequía como un fenómeno climático atribuido al calentamiento global, propuso la introducción de ganado de otras regiones antes de que los precios se incrementen.
El precio proyectado del kilo de carne ovina en pie oscilaría entre 80 y 97 pesos este año, mientras que los barbacoeros podrían enfrentar costos de hasta 500 pesos por kilogramo. Este aumento impactaría en el consumo, estimándose que una familia de cuatro a cinco integrantes gastaría alrededor de mil pesos.
Ante la falta de forraje en la región, el secretario sugiere a los productores que consideren una compra consolidada de Guanajuato o Jalisco, donde hay disponibilidad. Esta estrategia colectiva se traduciría en costos menores en comparación con las adquisiciones individuales.
Eulogio Rodríguez Mendoza también reveló un proyecto para adquirir 24 mil cabezas en un año con fines reproductivos, buscando así superar el déficit actual. Cada hembra aportaría de uno a dos crías anuales, contribuyendo a la estabilidad del suministro.
En el municipio, alrededor de 100 familias están dedicadas a la elaboración de la barbacoa, satisfaciendo las expectativas de 20 mil turistas que visitan la zona mensualmente. A pesar de los desafíos en el manejo de residuos orgánicos, no hay indicios de una crisis inminente, ya que tanto los productores de borregos como los barbacoeros tienen la opción de abastecerse fuera del municipio para mantener sus operaciones.
