El empresario Carlos Slim ha expresado su oposición a la propuesta de reducir la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales, que actualmente se discute en la Cámara de Diputados. Según Slim, trabajar menos horas resultaría en menores ingresos para los trabajadores, y sugirió que es preferible mantener el horario laboral actual. En este contexto, el magnate también ha propuesto elevar la edad de jubilación en México a 75 años, una idea que ha causado gran controversia y ha sido objeto de intenso debate.
Durante su participación en un foro en España, Slim argumentó que el aumento en la esperanza de vida justifica la necesidad de extender los años de trabajo. En su opinión, muchas personas viven hasta los 90 o 95 años, y extender la edad de jubilación permitiría una mejor gestión de los recursos del Estado, aliviando el peso sobre el sistema de pensiones y evitando el desequilibrio en las finanzas públicas. Actualmente, en México, la edad mínima para recibir una pensión es de 65 años, un estándar que contrasta con la propuesta de Slim.
Slim también enfatizó que un cambio en la edad de jubilación permitiría mantener la estabilidad económica del país a largo plazo. Según él, la solución está en trabajar tres días a la semana, con jornadas de 12 horas, lo que permitiría compartir empleos entre más personas. La propuesta, que sugiere una jubilación a los 75 años, ha generado críticas por ser considerada un retroceso en los derechos laborales, comparándola desfavorablemente con las prácticas de otros países donde la edad de retiro es significativamente menor.
Las declaraciones de Slim abren una discusión sobre el futuro del trabajo y las pensiones en México, en un momento en que el país enfrenta desafíos significativos en cuanto a la sostenibilidad de su sistema de seguridad social.