La industria automotriz mexicana ha señalado que China jugará un papel crucial en la renegociación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), prevista para el próximo año. Francisco González Díaz, presidente ejecutivo de la Industria Nacional de Autopartes (INA), destacó que uno de los principales puntos a revisar será el impacto de China en el mercado automotriz de la región. Aunque empresas chinas han comenzado a vender automóviles en México, no se trata de firmas que ensamblen o fabriquen autopartes localmente.
A partir del 1° de octubre, México eliminó la exención de aranceles a los autos eléctricos provenientes de países sin acuerdo de libre comercio, en su mayoría de China, lo que ha resultado en un gravamen del 25%. Esta medida refleja una tendencia proteccionista que busca limitar la influencia de las importaciones chinas en el mercado automotriz norteamericano.
Odracir Barquera, director general de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), advirtió que la renegociación del T-MEC se dará en un entorno de complejidades geopolíticas, destacando que, para mantener la competitividad, México, Estados Unidos y Canadá deberán evitar políticas restrictivas que dañen la integración regional. La industria automotriz representa el 22% de todo el comercio en América del Norte, convirtiéndose en un componente vital del tratado.
La posibilidad de que se implementen barreras comerciales adicionales preocupa a los líderes de la industria, quienes consideran que la colaboración es clave para mantener la región como la segunda mayor productora de vehículos a nivel mundial y reducir la brecha con Asia.