En varias zonas de la Huasteca hidalguense, como Huejutla, Atlapexco y Orizatlán, se ha encontrado una especie invasora bastante peculiar: la “Rana Toro” (Lithobates catesbeianus), y ya está causando estragos en los cuerpos de agua locales. Esta especie, conocida por su impresionante tamaño, se ha ido expandiendo rápidamente en ríos y lagos de la región.

Según Ricardo Mendoza, biólogo del Instituto Tecnológico de Huejutla (ITH), los estudiantes de la institución han encontrado a más de 50 de estas ranas en la zona. Lo más preocupante es que, al ser un animal de gran tamaño, se alimenta de todo lo que encuentra a su paso: desde larvas de otras especies hasta peces, lo que está reduciendo de manera alarmante las poblaciones acuáticas en estos ecosistemas.
“Este reptil está alterando todo el ecosistema local, porque destruye a otras especies nativas. Lo que estamos haciendo en el ITH es capturarlas, tomar medidas y datos, y desarrollar un proyecto Innovatec que podría transformar a estas ranas en productos como snacks para mascotas”, comentó Mendoza.
Aunque no representan un riesgo directo para los seres humanos, el impacto negativo que están causando en el equilibrio natural de la zona podría traer consecuencias a largo plazo. Además, atraparlas no es tarea fácil. Son muy rápidas y se esconden en lo más profundo del agua, lo que ha obligado a los biólogos a usar redes grandes para pescar, aunque no siempre es suficiente.
Por si fuera poco, el ITH, ubicado cerca de la comunidad de Chalahuiyapa, es un lugar clave para los estudiantes de biología. Diariamente, decenas de alumnos visitan el herpetario de la institución y participan en visitas guiadas para aprender más sobre la fauna local, ¡una excelente forma de involucrarse con el medio ambiente! 🌱