#Desafíos en Finanzas: Bajos Ingresos y Altas Deudas Reporta #Banco de Mexico

El Banco de México (BdeM) revela que las personas con menores ingresos son las que más han solicitado créditos en los últimos meses y también las que presentan mayores dificultades para cumplir con el pago de sus deudas ante las instituciones financieras. Aunque el saldo de la deuda se mantiene estable, se observa un mayor apalancamiento en aquellos con ingresos más bajos, lo que ha llevado a un aumento en la morosidad, especialmente en los créditos personales o de nómina.

Según el informe de estabilidad financiera más reciente, el tercer trimestre de 2023 mostró un crecimiento significativo en la morosidad de los créditos concedidos a personas con ingresos mensuales inferiores a 5 mil pesos y entre 10 mil y 25 mil pesos, representando casi la mitad de la cartera de consumo. Este incremento en los índices de impago es evidente en los acreditados con financiamiento personal o de nómina.

A pesar de este panorama, el financiamiento total al consumo ha experimentado un notable crecimiento en términos reales, con un dinamismo tanto en la banca múltiple como en otros intermediarios financieros no bancarios y tiendas departamentales. El crédito al consumo otorgado por la banca ha aumentado durante el segundo y tercer trimestre de 2023, con tasas de crecimiento anual positivas en todos sus segmentos.

El informe destaca el crecimiento de la cartera de tarjetas de crédito, impulsado por un mayor uso de las líneas de crédito y un aumento en el crédito automotriz. Sin embargo, la carga financiera de los acreditados con crédito al consumo ha mostrado una tendencia a la baja en todos los segmentos de la cartera no revolvente, mientras que la morosidad continúa en aumento, especialmente en las tarjetas de crédito.

Aunque se reconoce el aumento en la morosidad, el BdeM sugiere que los riesgos asociados a esta cartera parecen mantenerse bajo control. Los nuevos créditos al consumo otorgados por la banca múltiple muestran una probabilidad de incumplimiento baja en comparación con los niveles observados en 2022. No obstante, se enfatiza la importancia de vigilar de cerca la posible materialización de riesgos mayores a los esperados en el futuro.

Autor Eduardo Martinez

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