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Un nuevo estudio sobre muestras recolectadas en el mercado de animales de Huanan, en Wuhan, está reforzando la idea de que este lugar fue clave en la propagación inicial del covid-19. Los investigadores analizaron a fondo el material genético de cientos de muestras de las paredes, el suelo, las máquinas y los desagües del mercado, y han identificado exactamente qué especies de animales estaban presentes en la zona donde se encontraron la mayoría de las muestras positivas del virus.
Entre los animales hallados en las áreas con más muestras de SARS-CoV2 están el perro mapache, la rata de bambú, el conejo europeo, el erizo de Amur, el puercoespín malayo y la civeta de palma enmascarada. Estos nuevos hallazgos suman pruebas sólidas, aunque indirectas, que sugieren que el virus pudo haber saltado de estos animales a los humanos, y que el mercado fue un punto central de esa propagación temprana.
Los científicos utilizaron una técnica llamada secuenciación metagenómica para identificar las especies de animales en el mercado, que les permite leer todo el material genético de las muestras y rastrear su origen. Aunque el análisis, publicado en la revista Cell, no confirma que estos animales estuvieran infectados, su ADN se encontró muy cerca del virus, lo que indica una fuerte posibilidad de que se contagiaran dentro del mercado.
Entre los animales presentes, los conejos, perros y perros mapache son conocidos por ser susceptibles a infecciones por covid-19. De hecho, los perros mapache son capaces de transmitir el virus, lo que los convierte en candidatos probables para haber sido los primeros en contagiar a los humanos.
El equipo de investigación también llevó a cabo un análisis evolutivo utilizando el material genético de las muestras, lo que les ayuda a estimar el momento de la aparición del virus. Según el Dr. Kristian Andersen, principal autor del estudio, se cree que el virus surgió entre mediados de noviembre y mediados de diciembre de 2019.
Los hallazgos apuntan a que el virus presente en el mercado surgió al mismo tiempo que el que causó la pandemia, sugiriendo que son el mismo. Si el virus hubiera llegado de otro lugar y luego se hubiera propagado en el mercado, los tiempos de aparición habrían sido diferentes, afirma Andersen.
Además, se ha descubierto que casi un tercio de las primeras 174 personas infectadas con covid-19 tenían alguna relación con el mercado, y muchas otras residían cerca de este lugar en una ciudad con más de 12 millones de habitantes.
Andersen, al analizar los datos, quedó sorprendido por lo estrecha que era la agrupación de casos en el mercado. “No podía creer lo que estaba viendo”, comentó. Otra evidencia que respalda la teoría de que el mercado fue el origen de la pandemia es que los dos linajes del virus que circulaban al inicio –linaje “A” y linaje “B”– se encontraron en las muestras recogidas allí.
La profesora Florence Debarre, del Centro Nacional de Investigación Científica de Francia, resaltó que los nuevos hallazgos añaden más peso a la teoría de un origen vinculado al comercio de animales silvestres en el mercado de Huanan. Este estudio se suma a otros análisis que también apuntan hacia un origen animal del covid-19.
Aunque el Dr. Andersen es consciente de que muchos descartarán su trabajo por su historial, él asegura que lo único que ha hecho es adaptarse a las evidencias. A pesar de las teorías de conspiración y los debates, sostiene que los datos apuntan hacia un contagio animal en el mercado de Huanan.
Por último, el Dr. Andersen enfatiza la necesidad de regular mejor el comercio de animales silvestres, que sigue representando un riesgo considerable. “No se está hablando lo suficiente sobre esto”, concluye.
Este nuevo estudio podría ofrecer lecciones cruciales para prevenir futuras pandemias y subraya la importancia de seguir investigando los orígenes del SARS-CoV2 para entender cómo prevenir crisis de salud pública en el futuro.
