El llamado a la acción ha sido emitido por el Comité de Conservación del Centro Histórico de la ciudad, encabezado por Bonfilio Salazar, quien destaca la necesidad apremiante de restaurar ocho destacados monumentos que son pilares de la identidad de la capital, y que lamentablemente han sido relegados durante diversas administraciones gubernamentales.
Estos monumentos, situados mayormente en el corazón del antiguo Pachuca, abarcan diferentes periodos históricos de la ciudad, desde la época colonial hasta el presente. Entre ellos se encuentran el Reloj Monumental, el Monumento a Miguel Hidalgo y Costilla, el Horno de Cremación, la Portada del Panteón Municipal, el Monumento a Francisco I. Madero, varias esculturas en el Parque Miguel Hidalgo, el Monumento al General Felipe Ángeles en el Panteón Municipal y los murales de José Hernández Delgadillo.
El profesor Bonfilio Salazar, una figura respetada en la sociedad pachuqueña, contextualiza la importancia histórica de estos monumentos, remontándose a la época prehispánica habitada por los pueblos hñahñu y náhuatl, hasta su papel como enclave minero en el siglo XVI. Destaca además los eventos trascendentales que han marcado la historia de la ciudad, como la guerra entre conservadores y liberales y la Revolución Mexicana.
La arquitectura de Pachuca, caracterizada por una mezcla de estilos que incluyen el barroco, neoclásico, ecléctico y art decó, sirve como escenario para estos monumentos que, desafortunadamente, han sido descuidados en los últimos años debido a la negligencia, falta de conocimiento y, en algunos casos, intereses particulares de las autoridades.
Por ello, Salazar hace un llamado no solo al gobierno municipal, sino también al estatal y a los legisladores locales y federales, enfatizando la necesidad de proteger este invaluable patrimonio cultural.
Uno de los ejemplos más emblemáticos es el Reloj Monumental, erigido el 15 de septiembre de 1910, apenas dos meses antes del estallido de la Revolución Mexicana.