La reciente aprobación en comisiones del dictamen que despenaliza el aborto sin restricciones de tiempo en la Ciudad de México ha generado un intenso debate entre especialistas en salud y legisladores. Los médicos y expertos han alertado sobre los riesgos que implica esta medida, argumentando que no se han considerado adecuadamente aspectos críticos como el dolor fetal y las implicaciones para la salud de las mujeres.

Onofre Zenil, médico cirujano, y José Raygoza, experto en administración hospitalaria, destacaron que los abortos realizados después de las 12 semanas de gestación son peligrosos e insensatos, y podrían representar un crimen. Estos profesionales de la salud subrayan que la evidencia científica reciente muestra la sensibilidad del sistema nervioso central en los bebés por nacer, una realidad que no ha sido tomada en cuenta en las decisiones legislativas.
A pesar de que la iniciativa ha sido defendida con el argumento de mejorar la salud de las mujeres y reducir la mortalidad materna, estudios señalan que los beneficios son discutibles. Según información presentada por los médicos, la reducción de la mortalidad materna ha sido más significativa en estados como Chiapas y Morelos, donde no se ha implementado el aborto legalizado, cuestionando así la efectividad de esta política en la capital.
La asociación UNNA Infancia también se ha pronunciado al respecto, argumentando que las políticas públicas deberían abordar las causas subyacentes que llevan a las mujeres a buscar abortos en condiciones de riesgo. Además, insisten en la importancia de considerar la capacidad de los fetos para sentir dolor, un tema respaldado por investigaciones en neurofisiología y medicina fetal que han cambiado la forma en que se gestiona el dolor en neonatología.
UNNA Infancia, una organización comprometida con la protección de las mujeres embarazadas y los niños por nacer, ha señalado que el dictamen aprobado en las comisiones de Administración y Procuración de Justicia, y la Igualdad de Género del Congreso capitalino, ignora importantes datos científicos. Este dictamen, aprobado el 4 de noviembre con 15 votos a favor y 6 en contra, pasará al pleno el jueves, donde requerirá una mayoría simple para su aprobación.
El debate en torno a esta legislación continúa polarizando a la sociedad mexicana, con preocupaciones sobre las consecuencias que podría tener para la salud pública y la protección de los derechos de los niños por nacer. Mientras tanto, el desenlace en el Congreso será crucial para definir el futuro de esta controvertida política en la Ciudad de México.