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Las autoridades lograron capturar a Eduardo “N”, el individuo acusado de un ataque brutal a dos jóvenes en Naucalpan, uno de los cuales resultó asesinado y otro herido. Este trágico evento tuvo lugar el pasado 21 de septiembre cuando las víctimas, dos adolescentes de 13 años, fueron atacadas mientras regresaban a casa después de la escuela.
Según los informes, Eduardo “N” fue detenido en Tijuana, Baja California, como resultado de un esfuerzo conjunto de varias agencias y fiscalías, incluyendo la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana del Gobierno de México, la Comisión Nacional Antihomicidio (CONAHO), la Coordinación Nacional Antisecuestro, la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, y la Policía Municipal de Tijuana.
Las investigaciones revelaron que el presunto agresor, Eduardo “N”, huyó del Estado de México después de que se emitiera una orden de aprehensión en su contra. Se cree que utilizó su conocimiento de rutas nacionales como conductor de transporte de carga terrestre para evadir a las autoridades, pasando por Michoacán, Jalisco, Sonora y finalmente a Baja California.
La captura de Eduardo “N” se logró gracias a una labor exhaustiva de investigación, que incluyó entrevistas, cateos en propiedades en Naucalpan, análisis de videos, comunicaciones y fuentes abiertas. Este individuo fue finalmente ubicado en Tijuana y arrestado en cumplimiento de una orden de aprehensión. Posteriormente, fue trasladado al Estado de México para enfrentar las consecuencias legales de sus acciones.
El crimen que se le imputa ocurrió en un paraje cercano a la secundaria de las víctimas, cuando las adolescentes fueron interceptadas y llevadas a un área boscosa, aparentemente con la intención de agredirlas sexualmente. La víctima fallecida, Ivonne, sufrió heridas mortales, mientras que la otra adolescente resultó herida.
Las investigaciones se llevaron a cabo bajo una perspectiva de género, respetando los derechos de las víctimas y el interés superior de los menores. Se utilizaron pruebas forenses para respaldar el caso contra Eduardo “N”, incluyendo evidencia de sangre humana en la ropa encontrada cerca de su casa.
Este caso ha causado conmoción en la comunidad y ha aumentado la conciencia sobre la violencia de género y los crímenes contra mujeres en la región. Las autoridades continúan trabajando para identificar a las otras posibles víctimas relacionadas con este sospechoso.
