La cohesión de Movimiento Ciudadano (MC) hacia los comicios del 2024 se encuentra en peligro debido a desacuerdos internos que ponen en riesgo su éxito en las elecciones. Mientras Dante Delgado, el fundador del partido, rechaza formar alianzas, el grupo liderado por el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, muestra interés en explorar otras opciones políticas.
La sorprendente declaración del gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, acerca de su distanciamiento de Movimiento Ciudadano (MC), partido al que no pertenece pero en el que desempeña un papel destacado, ha generado incertidumbre en torno al proyecto liderado por el coordinador nacional, Dante Delgado Rannauro. Delgado insiste en que el partido debería competir por sí mismo en las elecciones federales de 2024.
El mensaje de Alfaro, emitido el 22 de agosto, fue claro y con una dirección evidente: “Ya no tengo interés en participar en un proyecto que no comprendo, donde todas las decisiones se toman de manera unilateral”, afirmó en una entrevista con medios locales.
Hace apenas dos semanas, durante una reunión privada en la Ciudad de México, MC parecía estar dispuesto a explorar el diálogo a pesar de las posturas divergentes entre sus principales líderes: Dante Delgado y el gobernador Alfaro.
En esa reunión, a la que también asistieron el gobernador de Nuevo León, Samuel García, y los coordinadores de MC en el Senado y la Cámara de Diputados, Clemente Castañeda y Jorge Álvarez Máynez, respectivamente, se buscaba decidir si el partido participaría solo en el proceso electoral 2023-2024 o formaría una alianza con partidos de oposición.
Sin embargo, la reunión concluyó sin una decisión clara. A pesar de los esfuerzos de Alfaro por abrir un espacio de diálogo entre los miembros del partido, prevaleció la ambigüedad. Sus llamados a no quedar aislados y a unirse con otros partidos para competir contra la Cuarta Transformación no tuvieron el impacto deseado.
La posición firme de Dante Delgado en favor de la estrategia de “ir en solitario” en 2024 desencadenó la rebelión del Grupo Jalisco. Este grupo está compuesto por 12 diputados, además del coordinador Álvarez Máynez, y dos senadores, junto con 16 legisladores locales y 57 alcaldes de Jalisco.
El desacuerdo y la discordia se han manifestado en dos corrientes dentro de la dirección de MC. Por un lado, están quienes defienden la idea de presentar un candidato propio en las elecciones, entre ellos se encuentran Dante Delgado, el diputado Jorge Álvarez y el gobernador Samuel García.
En el otro bando, se encuentran los que respaldan la propuesta de Alfaro de unirse al Frente Amplio Por México para enfrentar a Morena. Entre ellos están el senador Clemente Castañeda y los alcaldes Pablo Lemus (Guadalajara) y Luis Donaldo Colosio Riojas (Monterrey).
La renuncia de Alfaro a sus aspiraciones presidenciales ha abierto espacio para que Colosio Riojas y Samuel García ganen más simpatizantes. Cuando Alfaro confirmó que seguiría siendo el gobernador de Jalisco, hizo un llamado a Movimiento Ciudadano para que no se convirtiera en un mero testigo en la política.
La situación llegó a su punto álgido el 23 de agosto, cuando Enrique Alfaro y Dante Delgado intercambiaron declaraciones. En medio de esta disputa, el Grupo Jalisco emitió una carta firmada por 87 funcionarios y legisladores de Jalisco, expresando su apoyo a Alfaro y su compromiso de seguir con aquellos que cuiden los intereses del estado.
Dante Delgado respondió acusando a los firmantes de la carta de practicar “la vieja política” y de no haber sido informados antes de suscribir el documento.
En resumen, la división interna en Movimiento Ciudadano amenaza su viabilidad en las elecciones de 2024. Mientras Dante Delgado aboga por la independencia del partido, el grupo liderado por Enrique Alfaro busca explorar alianzas políticas para enfrentar a Morena. La incertidumbre sobre el rumbo del partido plantea desafíos significativos en su búsqueda por un mayor éxito en el panorama político.