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Después de un año de su inauguración, la séptima refinería de México, Dos Bocas, finalmente ha comenzado su producción de petróleo.
El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que la refinería de Dos Bocas comenzó a producir petróleo este viernes durante su Quinto Informe de Gobierno.
El objetivo principal es que el próximo año México deje de comprar gasolina y diésel en el extranjero y, en su lugar, procese todo el petróleo crudo en el país para agregar valor a su materia prima y mantener precios bajos de combustibles en beneficio de los consumidores.
López Obrador también mencionó que en diciembre se completará la planta coquizadora en Tula, Hidalgo, y en julio de 2024 se concluirá la de Salina Cruz. Estos proyectos representan una inversión conjunta de 6,500 millones de dólares y tendrán una capacidad combinada de convertir combustóleo de 160,000 barriles diarios.
La refinería en Paraíso, Tabasco, es un caso particular, ya que fue “inaugurada” hace más de un año, pero no procesó crudo debido a problemas técnicos y críticas sobre su ubicación.
El plan de López Obrador es que Dos Bocas (junto con las seis refinerías existentes) siente las bases para la independencia energética de México a partir de 2024.
Se espera que la refinería en Paraíso, Tabasco, produzca hasta 290,000 barriles de gasolina una vez que esté en plena capacidad. Pemex también confía en Dos Bocas para alcanzar sus metas de producción en 2024, con el objetivo de procesar 1,085,000 barriles de petróleo al día el próximo año.
