El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que la refinería Dos Bocas, ubicada en Tabasco, alcanzará en 15 días el 20% de la producción total de gasolina que se consume en México. Este avance, según el mandatario, es un paso crucial hacia la autosuficiencia energética del país. La construcción de la refinería ha sido criticada por su elevado costo, que superó los 16,800 millones de dólares, sin embargo, AMLO defendió la inversión, destacando que México reducirá su dependencia de las importaciones de combustibles.
El mandatario también señaló que con la puesta en marcha de las nuevas plantas coquizadoras en Salina Cruz y Tula, el país podría completar el ciclo de refinación, disminuyendo significativamente la necesidad de importar productos petroleros. Según AMLO, este enfoque contribuirá no solo a la autosuficiencia, sino también a la seguridad energética del país en el mediano y largo plazo.
Las declaraciones de López Obrador han generado diversas reacciones, con sectores aplaudiendo la apuesta por la independencia energética, mientras que críticos advierten sobre los riesgos financieros y la sostenibilidad a largo plazo del proyecto. La capacidad real de producción de Dos Bocas y el impacto en los precios de la gasolina serán aspectos clave a observar en las próximas semanas, conforme la refinería entre en operación plena.
Además, el presidente destacó que la construcción de Dos Bocas ha sido un desafío técnico y logístico, pero que es esencial para el plan del gobierno de reducir la dependencia energética y fortalecer la infraestructura nacional en este sector. A pesar de las críticas, el gobierno confía en que este proyecto se convierta en un pilar fundamental de la estrategia energética de México.