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Desde el inicio de la invasión rusa en febrero de 2022, Ucrania ha perdido más de 10 millones de habitantes, según un informe presentado por la ONU este martes. Esta disminución se debe a una combinación de factores, incluidos el éxodo masivo de ciudadanos y una drástica caída en la tasa de natalidad.
Florence Bauer, directora regional del Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA), explicó que, incluso antes del estallido de la guerra, Ucrania ya enfrentaba serios desafíos demográficos. La baja tasa de natalidad y el envejecimiento de la población eran problemas que afectaban al país, agravados ahora por el conflicto bélico.
El éxodo de 6,7 millones de personas que han huido desde el inicio del conflicto y la caída de la tasa de fecundidad a un promedio de un hijo por mujer, han colocado a Ucrania en una de las posiciones más críticas a nivel global en términos de crecimiento poblacional. Esta cifra está muy por debajo del nivel necesario para renovar la población, que es de 2,1 hijos por mujer.
A estos factores se suman las numerosas muertes provocadas directamente por el conflicto armado, lo que agrava aún más la situación demográfica del país. El impacto de la guerra ha exacerbado una tendencia migratoria ya presente antes de la invasión, donde los jóvenes buscaban oportunidades en otros países, dejando a Ucrania con una población envejecida.
La ONU advierte que la situación actual presenta enormes retos para la recuperación del país, tanto en el ámbito económico como social, destacando que revertir esta tendencia será una tarea extremadamente difícil.
