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Tras el paso de la tormenta tropical Chris, el norte de Hidalgo enfrenta severas afectaciones. Francisco Quijas Cruz, subsecretario de Protección Civil y Riesgos en Hidalgo, reporta que se mantiene la vigilancia en los municipios de Sierra Gorda, Otomí Tepehua y la región Huasteca.
En entrevista con El Universal Hidalgo, Quijas Cruz destacó que, aunque no se han activado todos los albergues disponibles, los residentes afectados por las lluvias han optado por refugiarse temporalmente con sus familiares.
Hasta el momento, 517 espacios están identificados como albergues en la entidad, equipados para atender emergencias y proteger a la población vulnerable.
En la Huasteca y Sierra, los arroyos han representado la mayor amenaza, arrasando con propiedades debido a la crecida inesperada tras la sequía.
En San Felipe Orizatlán, Zacatahual, las familias se encuentran en riesgo debido a la creciente del río, que ha provocado inundaciones en varias viviendas.
En Yahualica, los habitantes de Santa Teresa y El Arenal solicitan ayuda tras el desbordamiento de un arroyo y el aumento del caudal del río, dejando numerosas casas inundadas.
En la carretera federal México-Tampico, específicamente en La Virgencita cerca de Tlanchinol, se reportan derrumbes y exceso de agua, obstaculizando el tráfico y aumentando los riesgos para los conductores.
En Huejutla, se verifica la caída de bardas y se resguarda a la población ante posibles desbordamientos en Teacal, Zapotitla y Chililico.
El Ejército Mexicano ha implementado el Plan DNIII junto con autoridades estatales para minimizar daños y rescatar pertenencias en Huehuetla, donde decenas de viviendas resultaron inundadas.
En tanto, el Río Tula muestra un crecimiento gradual en su caudal, alertando a colonias ribereñas en Ixmiquilpan y la cabecera municipal.
Los municipios de la Sierra Gorda enfrentan dificultades con sus carreteras y caminos debido a excesos de agua en ríos y arroyos, afectando la comunicación en diversas localidades.
