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Ayer, pasadas las 12:30 horas, miembros de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (FECSM) llegaron a la ciudad de Chilpancingo para demandar justicia por el fallecimiento de Yanqui Kothan Gómez Peralta, estudiante de la normal rural de Ayotzinapa, ocurrido la noche del pasado jueves.
Los tres autobuses que transportaban a los jóvenes se detuvieron a 300 metros de las instalaciones de la 35 Zona Militar sin incidentes. En el lugar se presentaron el secretario de Gobierno, Ludwig Marcial Reynoso Núñez, y Francisco Cisneros, director de Gobernación estatal, quienes sostuvieron una reunión con tres líderes estudiantiles. Sin embargo, al finalizar la conversación, el primero se negó a hacer comentarios sobre un posible acuerdo, e incluso los reporteros fueron apartados por el equipo de seguridad del funcionario.
A pesar de que las oficinas del palacio de gobierno y otras dependencias permanecieron cerradas y custodiadas por la policía estatal y la Guardia Nacional, se supo que las movilizaciones se suspendieron temporalmente en señal de duelo por el fallecimiento de Yanqui Kothan. Se anunció que las protestas se reanudarán el próximo lunes, lideradas por la FECSM.
Tanto egresados de la escuela Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa como miembros de la FECSM exigieron la dimisión de la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, así como la destitución y enjuiciamiento del secretario de Seguridad Pública estatal, general Rolando Solano Rivera, y de los responsables tanto materiales como intelectuales del suceso.
Mediante un comunicado, condenaron el ataque del 7 de marzo, que resultó en el fallecimiento de Yanqui Kothan Gómez Peralta por disparos en la cabeza con armas exclusivas del Ejército. Afirmaron que la camioneta estaba detenida y con el motor apagado cuando llegaron los policías estatales, quienes utilizaron una fuerza excesiva y abrieron fuego.
