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Finney, el valiente compañero canino, se convirtió en el protagonista de una historia asombrosa en las Montañas Rocosas de Estados Unidos. Su dueño, Rich Moore, de 71 años, desapareció durante una excursión en agosto pasado. A finales de octubre, el cuerpo de Moore fue encontrado gracias a un cazador, pero lo sorprendente fue que Finney, un Jack Russell terrier, había permanecido a su lado todo ese tiempo, custodiándolo.
El hallazgo conmovió a la comunidad local, ya que el fiel canino mostraba signos evidentes de desnutrición, indicando que había permanecido junto al cuerpo de su dueño mientras lidiaba con las adversidades de la naturaleza.
Delinda Vanne-Brightyn, del equipo de Búsqueda y Rescate de Taos (TSAR), relató que se realizó una búsqueda exhaustiva desde la montaña Blackhead hasta el estacionamiento donde Moore dejó su auto, pero no se encontraron pistas. Aunque el cuerpo fue localizado, las circunstancias de la muerte aún están bajo investigación, aunque se descarta la posibilidad de un asesinato.
Las autoridades consideran que las condiciones extremas del camino podrían haber llevado a que Moore se cayera y resultara herido durante la travesía por la montaña. Finney, por su parte, fue llevado a un veterinario tras ser rescatado. Aunque había perdido peso y enfrentado bajas temperaturas, se encontraba en buen estado de salud. El perro logró sobrevivir alimentándose de ardillas que cazaba y bebiendo agua del arroyo.
Después de pasar un tiempo bajo el cuidado del Control de Animales de la Oficina del Sheriff del condado de Archuleta, Finney fue entregado a sus otros dueños. La historia de lealtad y supervivencia de Finney ha conmovido a la comunidad local y más allá.
